Caila Conklin, MT-BC (ella/su/suya) es una musicoterapeuta certificada y creativa interdisciplinaria, a quien le apasiona el proceso de conocer a las personas en su situación actual. En su trabajo como musicoterapeuta, Caila se esfuerza por crear experiencias adaptativas basadas en la música a través de las cuales las personas de todos los orígenes, capacidades y etapas de la vida puedan prosperar. A lo largo de los años de desarrollo de su estilo como musicoterapeuta, Caila ha perfeccionado su práctica basándose en la creencia de que la música tiene el poder de unirnos y alquimizarnos.

Después de completar sus estudios de licenciatura en Musicoterapia y Psicología en la Western Michigan University (Kalamazoo, MI), Caila se estableció en Lansing, donde se desempeñó como musicoterapeuta en varias organizaciones comunitarias y de atención médica. Actualmente, brinda servicios de musicoterapia para el programa de atención oncológica de Corewell Health en el pabellón oncológico Lemmen Holton en Grand Rapids y en los centros oncológicos regionales de Corewell en todo el oeste de Michigan. Fuera de su trabajo como musicoterapeuta, Caila actúa a nivel local y es una voluntaria activa en varias organizaciones teatrales, además de haber sido miembro del coro de Sistrum, el coro de mujeres de Lansing.

Declaración de interés:
De niña, siempre me sentí atraída por reunirme con otras personas para crear arte; componer canciones, desarrollar obras breves, tocar música con quien quisiera. A lo largo de mi adolescencia, desarrollé una afinidad por brindar atención a poblaciones vulnerables, lo que me llevó a trabajar durante años en hogares de ancianos y centros de rehabilitación. A medida que se acercaba el momento de solicitar ingreso a las escuelas para avanzar en mi educación, anticipé que haría una audición para estudiar música en varios programas, y mi instructor de banda de la escuela secundaria me animó a leer sobre el campo de la musicoterapia. Después de mi investigación inicial, me sentí obligada a aprender más y poco después me lancé a estudiar en la Western Michigan University.

Este puesto de Creative Fellow me entusiasma por muchas razones. Creo firmemente en la fuerza transformadora de las personas empoderadas y conectadas entre sí. Siento que la música y el arte son catalizadores perfectos del cambio y que tienden puentes entre las personas para construir una comunidad. Habiendo pasado la mayor parte de mi carrera profesional trabajando para desmitificar las formas en que se puede aplicar la música para incitar un cambio positivo a nivel individual y colectivo, estoy encantada con la oportunidad de amplificar y demostrar este mensaje en el oeste de Michigan. También considero que el trabajo basado en la comunidad es profundamente importante, así como el trabajo de expandir y educar a otros sobre el campo de la musicoterapia. Como es una profesión más joven, a menudo hay conceptos erróneos y cualquier oportunidad de proporcionar una mayor comprensión de sus aplicaciones es bienvenida.